En la franquicia de Dragon Ball, hay un estado de Super Saiyan que Vegeta nunca ha alcanzado, y ese es el Super Saiyan 3. Vegeta ha alcanzado el Super Saiyan 3 en videojuegos y en la serie web Dragon Ball Heroes, pero nunca lo ha utilizado en el canon. Dado el poder que se sabe que posee esta forma, es curioso que Vegeta nunca haya intentado siquiera la transformación, entonces ¿por qué no lo ha hecho?
El Super Saiyan 3, reconocible por la falta de cejas del usuario y el cabello increíblemente largo, hizo su debut en el anime en la Saga de Buu de Dragon Ball Z, cuando Goku lo utilizó para luchar contra Majin Buu. Debido a su intenso entrenamiento en el Otro Mundo, obtuvo el poder necesario para ir más allá del Super Saiyan 2. Goku intencionalmente no lo utilizó cuando luchó contra Vegeta, quien estaba celoso del nuevo poder de Goku cuando se enteró de él. Más tarde, Goku enseñó la habilidad a Goten y Trunks, quienes pudieron usarla después de fusionarse en Gotenks. Hasta ahora, Goku y Gotenks son los únicos personajes que han alcanzado esta forma, pero Caulifla del Universo 6 también tiene la intención de lograr el Super Saiyan 3.
Vegeta decidió no utilizar el Super Saiyan 3 en lugar de ser incapaz de hacerlo
Vegeta ciertamente es lo suficientemente fuerte como para lograr la transformación, por lo que es un misterio por qué nunca lo intentó. En primer lugar, cabe destacar que Vegeta no pudo convertirse en Super Saiyan 3 en Dragon Ball Z. Simplemente no tenía las capacidades físicas en ese momento, ya que el Super Saiyan 2 era el límite de su poder. Sin embargo, Vegeta era lo suficientemente poderoso como para usarlo en Dragon Ball Super, dado su capacidad para utilizar formas más fuertes como el Super Saiyan Azul. De hecho, Vegeta como Super Saiyan 2 se defendió mejor contra Beerus que Goku en su forma de Super Saiyan 3. Por lo tanto, Vegeta debe haber tomado la decisión consciente de evitarlo.
El Super Saiyan 3 tiene defectos que Vegeta seguramente conocía, ya sea por observar a Goku o al intentarlo por sí mismo fuera de la pantalla. Es una forma físicamente exigente que drena la energía del Saiyan a una velocidad demasiado rápida. Vegeta tenía preocupaciones similares sobre la forma de Super Saiyan Ultra, que expresó a Trunks del Futuro durante la saga de Cell. Vegeta fácilmente podría haber tenido la misma opinión sobre la forma de Super Saiyan 3 de Goku y simplemente decidió que no era para él. En cuanto al combate, es más táctico que Goku y podría haber llegado a la conclusión de que una estrategia mejor es quedarse con el Super Saiyan 2.
Vegeta elige su propio camino como Super Saiyan
Por esta razón, tiene sentido que antes de la Saga de Golden Frieza, Vegeta creyera que era mejor usar el Super Saiyan 2 como su forma principal. Después de todo, es una transformación eficiente que ha servido tanto a Goku como a Vegeta tanto en Dragon Ball Z como en Dragon Ball Super. Un tercer factor que pudo haber motivado a Vegeta a no usar el Super Saiyan 3 fue su rivalidad con Goku. Las dos formas anteriores fueron alcanzadas por Goku y Gohan respectivamente, antes de que Vegeta pudiera obtener los mismos resultados. Teniendo en cuenta el orgullo de Vegeta, es comprensible que hubiera encontrado desagradable copiar continuamente a Goku.
Querer que su camino se desviara del de Goku fue la razón por la cual Vegeta decidió renunciar al Ultra Instinto e inventar el Super Saiyan Blue Evolved. Tal plan funcionó, ya que más adelante en el manga de Dragon Ball Super, Vegeta pudo desarrollar su propia forma única llamada Ultra Ego. Si bien Vegeta puede que nunca use el Super Saiyan 3 en el canon de Dragon Ball, la verdad es que nunca lo necesitó ni lo persiguió.
